Anacrónica

Porque no tengo tiempo ni espacio,
y la mujer de hoy será niña mañana,
porque no creo en que "el tiempo dirá"
tampoco entiendo de quemar etapas
y las guardo en aquél baúl que siempre llevo conmigo.
Porque limpio los recuerdos y los traigo al presente,
aunque completamente descontextualizados.
Anacrónicos, como yo,
mis olvidos recordados toman fuerza
y no se dejan vencer por esa autodefensa característica en mí.
Porque aunque a los veintidós esté de más jugar a la escondida,
yo me escondo entre tu sombra y te abrazo en ese suelo,
única forma de hacerlo sin que descubras quién soy.
Porque si tuviese la máquina del tiempo te reviviría,
pero como no puedo hacerlo no me queda más remedio
que seguir siendo anacrónica.
Porque así voy y vengo entre los aromas de la infancia,
pisoteo la tiza que separa al cielo de la tierra.
Porque de uno y otro lado de la soga encuentro a quien soy y a quien fui
y siempre encuentro lo mismo:
siempre me encuentro anacrónica.

Fotografía: Laura Cabrera